Cada uno de nosotros puede ayudar a estos refugiados, en este mismo momento, y sin tener que gastar dinero o energía. Basta con exigir que se cumpla la legislación internacional, que el dictamen del Tribunal Internacional de Justicia de La Haya de 1975, que concluía que el destino del pueblo saharaui lo debe decidir "la libre determinación de los habitantes del territorio mediante un referéndum de autodeterminación" se haga realidad. La celebración de ese referéndum fue la base de la paz firmada entre el FP y Marruecos después de 17 años de guerra (1975-1991), y debía celebrarse un año después de firmarse el acuerdo de paz, pero el ocupante ha puesto todas las trabas posibles, apoyándose fundamentalmente en el veto francés como miembro permanente del Consejo de Seguridad de las NNUU, y en el silencio culpable de la comunidad internacional, sobre todo de España, que a efectos legales, sigue siendo el administrador de un territorio que sigue formando parte de los "territorios no autónomos pendientes de descolonización".
Aunque todas las Resoluciones de las NNUU, desde esa fecha hasta hoy, reiteran que la solución al conflicto debe respetar la libre determinación, la situación permanece estancada, con una misión de las NNUU (MINURSO-Misión de las Naciones Unidas para el REFERÉNDUM del Sáhara Occidental), que sigue siendo la única sin competencias sobre DDHH, pese a las miles de denuncias sobre la vulneración de estos por parte del ilegal e ilegítimo ocupante, que incluso ha llegado a expulsar a los componentes civiles de dicha Misión, en un acto sin precedentes de quebrantamiento de la legalidad internacional.
Aunque todas las Resoluciones de las NNUU, desde esa fecha hasta hoy, reiteran que la solución al conflicto debe respetar la libre determinación, la situación permanece estancada, con una misión de las NNUU (MINURSO-Misión de las Naciones Unidas para el REFERÉNDUM del Sáhara Occidental), que sigue siendo la única sin competencias sobre DDHH, pese a las miles de denuncias sobre la vulneración de estos por parte del ilegal e ilegítimo ocupante, que incluso ha llegado a expulsar a los componentes civiles de dicha Misión, en un acto sin precedentes de quebrantamiento de la legalidad internacional.
Cada uno de nosotros puede ayudar con el simple hecho de firmar la petición para exigir una fecha para el referéndum. Esta recogida de firmas internacional fue lanzada por los Comités suizos para apoyar al pueblo saharaui y será entregada en mano en las Naciones Unidas.
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